Carnaval de Tarata
Patrimonio Cultural de la Nación, testimonio de la creatividad artística de los ciudadanos de Tarata.
La organización de los carnavales es asumida por los alferados; cargo que es tomado de manera voluntaria por quienes participan del llamado tumba árbol, versión local de las yunzas o corta monte. Adicionalmente, se encargan de la alimentación de todos los invitados, además de la bebida con la tradicional chicha de guiñapo.
Respecto a la coreografía, las comparsas ejecutan una serie de pasos y mudanzas: correteo, cojeo, zapateo doble, palmadas, giros de ida y vuelta, fuga y zapateo.
En cuanto al vestuario, las mujeres llevan faldas con faralas en varios tiempos, con encajes, cintas y telas de colores vivos; en tanto que los varones visten generalmente un pantalón de color entero con cintas y adornos de colores a los lados, así como chalecos decorados y pañuelos en el cuello.